En los últimos tres partidos de Champions el Barcelona ha encajado diez goles. El Borussia Dortmund marcó tres goles en el partido de vuelta de cuartos que puso en peligro una eliminatoria que estaba muy encarrilada tres el 4-0 de la ida. Frente al Inter, la cosa ha ido a peor. Los italianos le han metido siete goles en dos partidos. Demasiados para un equipo que quiere ser campeón de Europa.

El Barcelona se ha mostrado a lo largo de toda la Champions como un equipo con una fortaleza ofensiva descomunal. Raphinha, Lewandowski y Lamine Yamal han rendido de una manera excepcional. Sin embargo, en la parte de atrás los problemas han sido enormes. No ha sido sólo en esta eliminatoria, pero frente al Inter han sido demasiados y algunos de ellos de manera increíble. Se han recibido goles de todo tipo por diversos motivos.

En la ida, lo de encajar un gol a los 30 segundos no es de recibo. Y el problema es que no fue un hecho aislado. En muchos partidos, el equipo azulgrana se ha visto sorprendido en los primeros minutos de juego. Le pasó frente al Benfica, el Atlético de Madrid y Dortmund, por poner tres ejemplos. En Montjuïc frente al Inter el equipo no entró con la suficiente concentración al campo y se vio con un 0-2 a las primeras de cambio.

En el partido de este martes el señalado fue Araujo. El uruguayo no estuvo bien en los dos últimos goles de los italianos que fueron los que realmente eliminaron al Barcelona después de la excelente reacción que habían tenido sobreponiéndose al 2-0 que el Inter había conseguido en la primera parte. En el empate en el descuento del partido, el uruguayo permitió que Acerbi rematara con facilidad a gol batiendo a Szczesny.

En la prórroga, Araujo cayó en la trampa de los italianos que le sacaron de su posición donde fue superado por el delantero del Inter y que acabó con el gol de Frattesi que ya fue el definitivo. Flick no había puesto de inicio al uruguayo que entró en el lugar de un Íñigo Martínez que sí había rendido a un gran nivel. El Barcelona pagó con creces el cambio.

En la primera parte, el Barcelona había sufrido también con sus errores defensivos. En el primero, Olmo perdió un balón en el centro del campo que se convirtió en una contra veloz que hizo que los italianos se adelantasen. Y en el segundo, el penalti de Cubarsí a Lautaro, que pudo evitarse, se convirtió en el segundo. Demasiados errores frente a un equipo como el Inter que no perdona.

Encajamos muchos goles, tenemos que revisarlo para lo que queda y el año que viene

Ronald Araujo

"Creo que dimos la cara, el equipo gustó pero encajó muchos goles. Hay que revisarlo para lo que queda y para el año que viene", dijo Araujo a la conclusión del choque plenamente consciente de los problemas del equipo en la parte de atrás. Unos errores que han sido determinantes para que el Barcelona no esté en la final de Múnich.

"Aprenderemos de este partido. Es una progresión. Queremos seguir aprendiendo. No tenemos ahora mucho tiempo para entrenar, pero la próxima temporada estaremos de vuelta", dijo Flick a la conclusión del partido.